Amigos intocables (Untouchable)

La enfermedad es una defensa contra la verdad es una de las lecciones del entrenamiento mental de Un curso de milagros que esta galardonada cinta francesa aborda de manera magistral. Un hombre adinerado de la París palaciega se encuentra con un afro inmigrante del guetto. Los motivos aparentes del encuentro son su condición de tetrapléjico y la necesidad que ambos tienen del otro para avanzar en sus vidas problemáticas.

A medida que la trama avanza, Phillippe y Driss, los protagonistas, entran en una relación santa que derrumba las fronteras, las ideas de separación y las aparentemente insalvables diferencias entre los mundos de ambos. La salvación es un juego de niños felices: luz, cámara y acción.

  • Directores: Olivier Nakache y Eric Toledano
  • Año: 2011
  • Duración: 112 minutos

Comentario sobre la película, brindado con 💖 por Héctor Cañón <eligedenuevoucdm@gmail.com>
(Transcripción de una charla)

Familia de luz, este es el comentario de la película “Amigos intocables”. El título original es la palabra intocable en francés; lo podemos ver en dos sentidos, ellos no pueden tocarse en sentido físico y tampoco el amor que se profesan es tangible. Philippe, el señor blanco francés, no tiene sensibilidad en el tacto y si Driss, el afro, lo toca no va a sentir nada. Pero el título también lo puedes ver como una representación del espíritu, del amor y de la relación santa que trasciende el cuerpo y que trasciende los mecanismos de la ilusión, como llama Jesús, nuestro maestro y nuestro Salvador, a los cinco sentidos.

Es maravilloso ver cómo la película empieza como una película muy seria, de acción, con una persecución policial y realmente se desarrolla como un juego de niños felices, es una de las formas como Jesús define este camino de despertar, la salvación.

Es maravilloso ver también cómo se encuentran el África del Gueto, los inmigrantes, los afros, los desvalidos de este mundo por decirlo de alguna forma y la Francia tradicional, palaciega, dueña de todas la tradiciones, del arte y del dinero. Ese perdón que Philippe y Driss experimentan como dos santos hijos de Dios, como dos maestros de Dios obradores de milagros, también representa un perdón histórico que a pesar de todas las dificultades viene sucediendo en los últimos años. Están representadas en ellos esas ilusiones de diferente raza, de diferente edad, de diferente condición económica, lo cual, como estudiantes de un Curso de milagros sabemos que es algo ilusorio. Es maravilloso ver en la película cómo el amor es el puente que permite que se unan esas dos realidades que tienen formas diferentes y que aparentan ser incluso opuestas.

Otra idea hermosa es la de la función especial, cuando se hacen esas entrevistas para ser el enfermero, el ayudante, el amigo de Philippe y llegan todos estos hombres con esas respuestas prefabricadas, nerviosos, que parecen como de cartón y a pesar de que Driss no quiere el trabajo hace parte del plan de Dios para su salvación que él ejecute esa función especial, esa misión y por eso es que lo obtiene.

Otra idea hermosa es que podemos vincular esta película con el Programa de recuperación espiritual de los 12 pasos, vemos que cada uno de ellos admite ante el otro la naturaleza de sus defectos y vemos cómo Philippe, a lo largo de la película, en su camino de perdón, se repara a sí mismo de la culpa, del miedo, del resentimiento que tiene por la muerte de su exesposa y cómo Driss también se repara a sí mismo, pero también repara a su madre, a su hermano y a la gente de su familia y así mismo. También cómo entre los dos sanan y reparan a la hija de Philippe, a Ivonne, la mujer que trabaja allí y empieza siendo muy rígida, y a toda esta asociación de la mansión donde ellos comparten. Esa reparación sucede a lo largo de la vida cotidiana, cuando él le está ayudando a vestirse, cuando salen a los paseos nocturnos y tienen estas conversaciones donde cada uno se burla del otro, en eso se representa el acompañar a tu hermano. Acuérdate que Jesús te dice que una relación santa también consiste en que el que esté más cuerdo de los dos es el que tiene que recordar la deuda de gratitud por el amor que le ha brindado su hermano, entonces la película nos lo muestra así.

Otra escena maravillosa es cuando la familia y la gente cercana a Philippe empieza a preocuparse por la presencia de Driss, él se cita con este amigo en el restaurante y literalmente su amigo le dice, refiriéndose a Driss, “tu amigo está loco, es violento. Todos estamos preocupados por ti”, y le dice que se han dedicado a investigar su pasado en el mundo, y lo sentencia. Enseguida es maravilloso ver cómo Philippe libera a Driss y libera ese instante como lo haría el Espíritu Santo, como lo haría un maestro de Dios, diciéndole, “si él tiene un pasado a mí me importa un bledo, él es justo lo que necesito porque él no me tiene lástima”. Entonces es maravilloso poder ver la idea de que Driss sana a Philipe porque no lo ve con lástima, no lo ve minusválido, no lo ve discapacitado, y hace de esa ilusión y de esa aparente tragedia una comedia y así se une a él trascendiendo el dolor. Otra idea maravillosa para ver acá es que Jesús te dice que cuando tus viejos aliados del mundo, cuando tus viejos amigos se dan cuenta que empiezas a despertar, intentan recordarte la promesa que has hecho con ellos de morir juntos, de culparse, de vivir en el miedo y la separación hasta que llegue la muerte. Entonces allí puedes ver cómo el círculo de la Expiación se redondea.

Esa idea redondeémosla recordando que en la elección 136 del entrenamiento mental de Un Curso de Milagros Jesús me dice que la enfermedad es una defensa contra la verdad porque creo que estoy separado de Dios, creo que el universo es mi enemigo y me veo a mí mismo fragmentado en un montón de formas que aparentemente no tienen ninguna conexión. Driss sana a Philippe al no verlo enfermo, al no verlo separado, al no verlo fragmentado, y al verlo en cada encuentro santo, en cada instante santo totalmente nuevo y como parte de sí mismo. Otro recurso que usa la película es la banda sonora que integra esos dos mundos, el mundo clásico de Berlioz, de Vivaldi, de Mozart con Kool & The Gang y otras bandas del funk.

Es deslumbrante ver cuando Driss vuelve al barrio y vuelve a saludar a sus amigos después de haber tenido su primera experiencia con Philippe, la música que lo acompaña es el concierto de dos violines de Vivaldi, allí se muestra cómo su experiencia en ese aparente otro lado de la ciudad, en la Francia ideal, lo que ha hecho es que él pueda ir dentro de sí mismo e integrar diferentes aspectos de su vida que se expresan en diferentes formas que manifiestan y expresan a Dios, porque recuerda que tú eres Dios experimentándose a sí mismo a través de la forma, a través de una experiencia humana. Me encanta la idea del radio, el radio teléfono al que Driss tiene que estar conectado todo el tiempo porque es un símbolo de la comunicación, del contacto consciente con Dios, con la fuente creadora de todas las formas de vida. A medida que se va integrando a ese nuevo mundo, y va sanando, y va poniéndose al servicio de su hermano Philippe, también va viajando a dentro de sí mismo y se va volviendo disponible, y cada vez más dócil, más suave, más servicial e inofensivo. Está disponible 24/7, todo el tiempo, está disponible para Philippe, está disponible para Dios y está disponible para sí mismo, para estar conectado a la fuente por medio del servicio y el amor incondicional.

Miremos un poco la idea de los dolores fantasmas que tiene Philippe, los podemos ver como una representación de nuestros dolores humanos, del sistema de pensamiento del ego. Un dolor fantasma, técnicamente, médicamente, es aquel donde la persona experimenta dolor en un miembro ausente como si este miembro estuviera allí, entonces estos dolores fantasmas los podemos ver como una representación de nuestras memorias de separación, como nos dice Jesús en Un Curso de Milagros estamos reviviendo el error original una y otra vez por medio de pensamientos de separación, de culpa y de miedo cuando en realidad nada eso está sucediendo. Jesús mismo se refiere a nuestras ilusiones como fantasmas, como dragones, como monstruos que representan que esto es sólo una idea en la mente separada, en la mente del Hijo de Dios que cree que pudo separarse de la mente de su Padre.

Vamos a la idea del parapente, que es el aparente motivo por el que Philippe queda minusválido. Él dice que siempre le gustó competir y ser el mejor, el más alto, el que lo hacía de la forma más precisa. Recuerda, en un Curso de Milagros Jesús nos señala que el amor no hace comparaciones. Philippe dice que tal vez su problema realmente no es estar minusválido, que su problema es que no puede con la ausencia de Alice, y realmente con lo que no puede, lo sabemos como estudiantes de Un Curso de Milagros, es con la culpa que le produce el hecho de que Alice haya muerto; él mismo lo dice en una frase literal cuando le confiesa a Driss en una de esas admisiones que tienen esta película, en esos reconocimientos que nos recuerdan el programa de los 12 pasos y que nos recuerdan a Un Curso de Milagros en el sentido de exponerse a la luz e identificar qué es lo que quiero entregar para que la gracia divina y el Espíritu Santo lo sanen. Philippe le dice a Driss, “yo me accidenté tal vez para sufrir como ella porque sabía que ella no podría recuperarse”, Él cree que va a expirar por medio de su cuerpo, por medio de la enfermedad y por medio del dolor, usando esta enfermedad como una defensa contra la verdad, porque él es sano, pleno, integro y perfecto como Dios lo creó, y tiene derecho a los milagros, más allá esa historia personal.

Es maravillosa esa idea de sanación y de perdón cuando ellos dos van a montar parapente; Philippe no tiene miedo de ese pasado y se entrega a la experiencia de nuevo estar allí volando totalmente libre. Por su parte, Driss, aunque tiene miedo, termina atravesando ese miedo. Para Philippe esto es una memoria del pasado y para Driss es una memoria del futuro, él tiene miedo de algo que no ha sucedido, pero finalmente logra vivir este instante santo de volar feliz como suele hacerlo en cada una de sus actividades.

Me encanta también la idea de que a, través de las cartas y de la pintura, Philippe y Driss extienden la pasión de su mente creativa y se vuelven co-creadores del universo junto con Dios al extender su mente por medio de estas formas. Vamos a la escena en la que ellos le suben a 12 kilómetros por hora la velocidad a la silla de ruedas y atraviesan ese puente a toda velocidad riendo. El puente es un símbolo del Espíritu Santo, lo hemos visto a lo largo muchas películas del despertar, Jesús se refiere a él con esa palabra, mientras que el 12 es un símbolo de ser co-creador del universo con Dios, de la respiración, de la presencia y de seguir al maestro interno.

Vamos cerrando con otra de las admisiones hermosas que tiene esta película, cuando Driss le confiesa a Philippe que su nombre es Bakari y que sus padres realmente son sus tíos que lo adoptaron, se confiesa y revela su historia personal para liberarla como se hace en los 12 pasos, y a la vez, nos muestra cómo ese despojarse y decir que su verdadero nombre es Bakari es como si estuviera diciendo que su verdadera identidad es ser el Santo Hijo de Dios, esa admisión lo libera. Además, el hecho de que haya un testigo hace que esa liberación sea aún más potente.

Vamos a la escena final, la película se cierra con ese flashback donde ellos están en la aparente persecución policial, pero que realmente es un juego de niños donde se vuelven a sanar y se reencuentran en la libertad, se encuentran trascendiendo las leyes del mundo, sabiendo que los gobiernan el amor y las leyes de Dios y su propio espíritu. Al final cuando Driss consigue la cita con la mujer con la que Philippe tiene su relación epistolar, la película se cierra mostrándonos que más allá del cuerpo él es amor, que más allá del cuerpo yo soy amor y que más allá del cuerpo aún soy libre porque soy pleno, perfecto e integro, tal como Dios me creó.

Gracias, te amo.

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