LECCIÓN 301 Y Dios Mismo enjugará toda lágrima. 1. Padre, a menos que juzgue no puedo sollozar. 2Tampoco puedo experimentar dolor, sentirme abandonado o creer que no se me necesita en este mundo. 3Éste es mi hogar porque no lo juzgo y, por lo tanto,

LECCIÓN 181 Confío en mis hermanos, que son uno conmigo. 1. Confiar en tus hermanos es esencial para establecer y sustentar tu fe en tu capacidad para trascender tus dudas y la falta de absoluta convicción en ti mismo. 2Cuando atacas a un hermano,